miércoles, 7 de marzo de 2012

EL COEFICIENTE DE RESTITUCIÓN HORIZONTAL

El "coeficiente de restitución" lo definimos en el post "La pista y su dureza" como la relación entre la velocidad vertical después del bote con respecto a la velocidad vertical antes del bote. Pues bien, también se podía definir la misma relación de volocidades pero teniendo en cuenta las velocidades horizontales de la bola. O sea como si estuviesemos viendo la bola desde un plano cenital.

Este CRh varía dependiendo de las superficies y está entre 0,1 y 0,3.

Al igual que la SuperBall los cordajes son superficies muy elásticas que devuelven a la pelota gran cantidad de la energía elástica almacenada.

El hecho de que el cordaje sea como una malla tejida tiene su porqué. En los setenta hubo un grupo de jugadores aficionados intentaron introducir en el circuito profesional un sistema de encordado diferente. El inventor fue un alemán llamado Werner Fischer. Consistía en un cordaje no tejido y por lo tanto las cuerdas se movían con mucha libertad, siendo perfectamente elásticas en el sentido vertical de la raqueta (además iban cubiertas con un tubo de plástico para disminuir aún más la fricción, por eso se llamaron spaghetti strings). El resultado de este sistema es que la energía tangencial almacenada en el cordaje durante el golpeo era recuperado casi en su totalidad por la bola produciendo golpes con muchísima cantidad de "top spin". Este sistema de encordado fué rápidamente prohibido antes de llegar al circuito profesional. Se puede leer algo más en el siguiente enlace "SPAGHETTI STRUNG RACQUETS".

Esto demuestra que le coeficiente de restitución no sólo depende de las propiedades elásticas de la pelota sino que adquiere gran importancia la superficie sobre la que lo hace.

Como comenté anteriormente en una pista de césped el CRv oscila entre 0,6 y 0,75 dependiendo de lo larga que sea la hierba, el tipo de césped o la dureza de la superficie inmediatamente debajo de la capa de césped.

Las pistas de tierra sorprendentemente tienen un CRv de 0,85 pero el CRh es muy bajo, es decir la bola se frena mucho horizontalmente. Para comprobar de mejor manera la rapidez o lentitud de una pista se utiliza normalmente el coeficiente de fricción de la pista. En las pistas de tierra batida este coeficiente puede llegar a ser superior a 0,9 para bajos ángulos de incidencia y sin embargo oscila entre 0,5 y 0,6 en pistas de césped. Es curioso observar como las partículas de tierra en una pista de tierra batida se comportan como bolas de rodamiento debajo de las zapatillas de los jugadores disminuyendo el coeficiente de rozamiento. Paradójicamente el coeficiente de rozamiento es bajo para las zapatillas y alto para la bola.

¿Tienen influencia en el tenis profesional estos factores físicos? Indudablemente que la tienen y si no se puede observar el historial bien distinto entre los dos jugadores dominadores de los últimos años en cuanto a su palmares en los diferente tipos de superficies: Roger Federer y Rafael Nadal.


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